CXXII
Soñé que tú me llevabas
por una blanca vereda,
en medio del campo verde,
hacia el azul de las sierras,
hacia los montes azules,
una mañana serena.
Sentí tu mano en la mía,
tu mano de compañera,
tu voz de niña en mi oído
como una campana nueva,
como una campana virgen
de un alba de primavera.
¡Eran tu voz y tu mano,
en sueños, tan verdaderas!…
Vive, esperanza, ¡quién sabe
lo que se traga la tierra!
- CONTEXTUALIZACIÓN.
Es un poema que pertenece a Campos de Castilla (1912). Es una obra de temática variada. Entre la fecha del primer núcleo de poemas (1912) y su cierre en 1917 hay un lapso con acontecimientos graves, especialmente en el plano personal por la muerte de Leonor, su esposa en 1912. En este poemario nos encontramos con piezas de paisaje, de paisaje y proyección humana, piezas con visión histórica, otras meramente descriptivas, piezas de preocupación existencial, de tema sociopolítico, poemas amorosos…El poema que vamos a comentar presenta la proyección del yo del poeta a través de un sueño evocando a Leonor, su esposa fallecida.
2. CONTENIDO.
El poeta evoca un sueño en el que en un paisaje lleno de simbolismo es conducido por su amada. Recuerda su mano y su voz que cobran realismo en el propio sueño y emotivamente clama a la esperanza, a la vida, más allá de la muerte.
3. TEMA.
Añoranza de Leonor a través de un sueño y anhelo de otra vida más allá de la muerte.
4. ESTRUCTURA:
- EXTERNA:
La composición está formada por 16 versos de arte menor, octosílabos.
- INTERNA:
El poema consta de tres apartados:
- Primer apartado: los seis primeros versos: El poeta expresa, en pasado, un sueño en el que es guiado por su amada en un caminar por un paisaje idealizado con evidentes simbolismos -que posteriormente analizaremos-
- Segundo apartado: Versos 6- 12. La evocación se centra, también en pasado, en su amada de quien se evoca su mano, para resaltar la comunión con el poeta y su voz alegre y joven.
- Tercer apartado: los cuatro últimos versos. En un pasado imperfectivo se recuerda con mayor intensidad emocional su voz y su mano para finalmente en imperativo expresar su anhelo de la existencia de otra vida más allá de la muerte.
- MÉTRICA.
El poema consta de 16 versos octosílabos estructurados en forma de romance ya que la rima es asonante (e-a) en versos pares, quedando libres los impares.
6. ESTILO.
Poema de carácter narrativo ya que se evoca el sueño de un recorrido guiado por Leonor. Con pasajes descriptivos, puesto que nos presenta un paisaje cargado de simbolismo, con una emotiva intervención en estilo directo al finalizar la composición. Por la expresión intimista, la adjetivación y el simbolismo utilizados es un poema que supone un retorno al tono de Soledades, por supuesto los aspectos temáticos referentes a la muerte y al anhelo de la vida eterna entroncan con la primera etapa de su producción.
Señalaremos los rasgos de estilo más relevantes:
Simbolismo: sueño, soñar: sentimiento y actividad del viajero, forma del conocimiento, soñar es una forma íntima de vivir; vereda: camino, caminar: búsqueda, buscar, anhelar aspirar. Es la búsqueda en el tiempo, nada se encuentra, solo transcurre la vida en espera de la muerte. La naturaleza: el campo, las sierras, los montes: realidad exterior, el viaje a través de la realidad solitaria hacia la muerte; la campana: el sonido, movimiento, juventud; alba de primavera: la juventud; la tierra: realidad solitaria de la muerte.
Adjetivación. Referente al color: blanco, verde azul: pureza, esperanza, lo onírico; algunos de ellos son epítetos: verde. Otros adjetivos; mañana serena, expresa el equilibrio y la paz del sueño, algunos para referirse a Leonor: nueva, virgen– personificación-, verdadera… en referencia a su juventud, vitalidad. Insistimos en la expresividad del “adjetivo definidor” como decía el poeta.
Otros recursos destacables son la utilización del quiasmo “blanca vereda/campo verde”; el azul de las sierras/ los montes azules” con la anáfora “hacia” en versos 4 y 5. Repeticiones: mano, campana, voz…Paralelismos y anáfora en los versos 10 y 11,…Estos recursos basados en repetición de palabras o de estructuras son recursos sencillos, propios de la lírica tradicional que Machado incorpora a este romance. El uso del apóstrofe en los versos 13 y 14 intensifica la expresividad que aumenta en el tono de los dos versos últimos con el tono apelativo del estilo directo del verso 15-16, en ese anhelo de la vida más allá de la muerte. También cabe señalar la antítesis entre “vive” y “se traga la tierra, personificación y metáfora de la muerte, el contraste señala también la propia contradicción del poeta entre la razón y lo inexplicable en el anhelo de la vida eterna.
7.CONCLUSIÓN.
Es un bello poema de carácter intimista, con elementos que recuerdan el estilo de Soledades: los sentimientos universales: anhelo, esperanza, muerte, eternidad…, con un estilo de tonos simbolistas, reflejo de su interés por los metros tradicionales y también por sus características evocadas en la combinación de estilo narrativo con pasajes descriptivos y finalmente la apelación en estilo directo…; una muestra de su amor por lo esencial, la sencillez y la lírica más popular.