NOTA PRELIMINAR: La introducción para estos dos proverbios es la misma que se ha indicado en el artículo anterior cuyo título es: Comentario de dos proverbios de Machado

LI

Demos tiempo al tiempo

para que el vaso rebose

hay que llenarlo primero.

  1. Tema: Lo esencial (la necesidad) del paso del tiempo en el desarrollo de la vida.
  2. Métrica : se trata de una soledad, estrofa formada por tres versos de arte menor con rima asonante en el primero y tercero ( el primer verso consta de 6 sílabas y los otros dos de 8 sílabas)
  3. Interpretación y estilo.

Los actos realizados por el ser humano necesitan tiempo para poder ser desarrollados. El paso del tiempo, el tópico “tempus fugit” tan recurrente en la poesía, aquí se presenta desde la perspectiva de lo necesario del transcurso del tiempo para el acaecer de los acontecimientos, de las acciones. La circunstancialidad (el tiempo) se impregna de esencialidad (la vida).

En el primer verso encontramos el uso de la 1º pers. plur. “demos”, se trata de una deixis personal inclusiva, con función apelativa para llamar al receptor que se funde con la primera persona, el poeta. Lo repetitivo de dar tiempo al tiempo expresa ese desdoblamiento del concepto del tiempo: a la vez circunstancia y hecho esencial. Expresión que por otra parte refleja la sabiduría popular, muy utilizada tradicionalmente “hay que dar tiempo al tiempo”.

El vaso se transforma en símbolo, un recipiente vacío es una vida sin vivir, y en ese sentido del vivir, y continuando con el símbolo para que “rebose” ha de irse “llenando”, han de vivirse los hechos, las experiencias vitales. Debemos destacar la sensación del paso del tiempo  lograda en las expresiones de posterioridad “para que el vaso rebose” y anterioridad “hay que llenarlo primero”, en esta último el “primero “ sirve para intensificar esa idea. Finalmente cabe apreciar el uso de una perífrasis modal de obligación “hay que…”  para insistir en lo necesario del transcurrir del tiempo en la vida del ser humano.

 

LXVI

Poned atención

un corazón solitario

no es un corazón.

 

  1. Tema: La deshumanización provocada por el individualismo.
  2. Métrica. Nos encontramos ante una tercerilla. Es una estrofa formada por tres versos de arte menor con rima consonante en el primero y tercero. En este caso concreto, los versos primero y tercero tienen 6 sílabas y el segundo tiene 8.
  3. Interpretación y estilo.

Comienza el poema con un imperativo, para apelar a los receptores ; como hemos señalado en otros proverbios , esta forma verbal además de poseer función apelativa es un uso muy expresivo para conseguir esa finalidad didáctica, a través de la rotundidad. La repetición del sustantivo “corazón” aporta intensidad y además el corazón es el símbolo del “ser humano” por excelencia, representa el mundo interior vinculado a las emociones y sentimientos más profundos. El adjetivo definidor de Machado, en este caso “solitario” que representa lo individual, el individualismo que negaría lo esencial del ser humano: la necesidad del otro, de los demás para mostrar las emociones y sentimientos y compartirlos, convivirlos. El último verso con esa negación rotunda está en la línea de la expresividad, de la insistencia y tiene un carácter didáctico y proverbial.

 

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